Hay algunas reglas a la hora de exportar madera, sobre
todo si es en bruto, es decir, sin haber sido procesada
en Brasil (que es cuando la madera pasa por procesos,
antes de que pueda venderse). Las normas ambientales
dejan claro que solo se pueden exportar maderas
naturales del país brasileño, que se denominan maderas
exóticas, como eucalipto y pino.